¿CUÁLES FUERON LOS DESASTRES NATURALES GLOBALES CON MAYORES PÉRDIDAS DURANTE 2023?
El terremoto de Turquía y Siria fue el desastre más devastador de 2023. Conoce cuáles fueron los otros desastres naturales con mayores pérdidas el año pasado, según la reaseguradora Munich Re.
La serie de terremotos en Turquía y Siria, en febrero de 2023, fue el desastre natural más destructivo del año, según evalúa un estudio realizado por Munich Re. El temblor de magnitud 7.8 en Turquía fue el más fuerte en décadas. Unas 58,000 personas murieron, se derrumbaron innumerables edificios y hubo daños importantes en la infraestructura.
Con pérdidas globales por 50 mil millones de dólares, también fue el desastre natural más costoso del año, asegura el informe de la reaseguradora más grande del mundo. Y agrega que, a pesar que el seguro de terremotos es obligatorio para los edificios residenciales en Turquía, las pérdidas aseguradas llegaron a 5,500 millones de dólares.
Tratándose de pérdidas totales, el informe de la firma alemana ubica al tifón Doksuri como el segundo desastre natural más costoso. En julio del 2023, la tormenta tocó tierra en la provincia china de Jinjiang, con velocidades de viento de unos 180 km/h. Acompañado de lluvias extremas que desencadenaron inundaciones destructivas, arrojaron pérdidas totales por unos 20,000 millones de dólares, de los cuales solo se aseguraron 2,000 millones de dólares. “Es un ejemplo de la gran brecha de seguro para los desastres naturales que persiste en China”, dice el estudio de Munich Re.
La tercera pérdida más costosa en términos globales fue el huracán Otis, en octubre de 2023. Fue un evento excepcional, ya que en 24 horas se desarrolló de una tormenta tropical débil a un huracán de categoría alta, que tocó tierra en Acapulco con velocidades de viento de hasta 265 km/h, que devastaron la ciudad. El informe de la reaseguradora estima las pérdidas totales en 12,000 millones de dólares y pérdidas aseguradas por unos 4,000 millones de dólares debido a la alta concentración de hoteles en la ciudad.
El estudio precisa que, de acuerdo al patrón que los científicos esperan, Doksuris y Otis son el resultado del cambio climático hacia un mayor número de tormentas intensas y tormentas con lluvias extremas.
LOS DESASTRES NATURALES DE 2023 EN CIFRAS
El estudio de Munich Re sintetiza que, en todo el mundo, los desastres naturales provocaron pérdidas por unos 250 mil millones de dólares, así como pérdidas aseguradas por 95 mil millones de dólares. Las pérdidas totales se sitúan en el promedio de cinco años, mientras que las pérdidas aseguradas se ubican ligeramente por debajo de la cifra media de 100,000 millones de dólares.
Lo anterior, explica la firma alemana, se debe a que, a diferencia de los dos años anteriores, no hubo desastres en los países industrializados que empujaron las pérdidas. Pone como ejemplo el caso del huracán Ian en 2022, que causó pérdidas globales de 100 mil millones de dólares y pérdidas aseguradas por 60 mil millones de dólares.
En cambio, las estadísticas de pérdidas se caracterizaron por el gran número de tormentas regionales severas y exhibe los casos de Estados Unidos y Europa. En la primera zona, fueron destruidos activos por un valor de 60,000 millones de dólares, de los cuales 50,000 millones estaban asegurados. En la segunda, contabiliza activos destruidos por 10,000 millones de dólares, de los que 8,000 millones de dólares estaban asegurados.
Sobre este tema, el estudio apunta que las investigaciones científicas confirman que el cambio climático favorece el clima severo con fuertes tormentas de granizo. Del mismo modo, señala que las estadísticas de pérdidas en las regiones analizadas, así como en otras regiones, tiende al alza.
En cuanto al número de muertes causadas por desastres naturales, Munich Re señala que aumentó a 74,000 en 2023, muy por encima de la media anual de los últimos cinco años, que fue de 10,000. Explica que, tras años de relativa calma, una serie de devastadores terremotos derivaron en desastres humanitarios. De hecho, 63,000 personas perdieron la vida como resultado de esos peligros geofísicos en 2023, más que en cualquier momento desde 2010.
Por el contrario, indica que las pérdidas económicas por desastres naturales estuvieron dominadas por tormentas severas: “el 76% de las pérdidas totales estaban relacionadas con el clima, mientras que el 24% tenía causas geofísicas”.
EL CAMBIO CLIMÁTICO PROVOCA ALTAS TEMPERATURAS EN 2023
Como destaca el estudio de Munich Re, los desastres meteorológicos se exacerbaron por temperaturas extremadamente altas. A decir verdad, 2023 se convirtió en el año más caluroso desde que comenzaron las mediciones de temperatura, lo que significa que los últimos 10 años son los más calurosos registrados.
El fenómeno de “El Niño”, una oscilación climática natural en el Pacífico Norte con efectos sobre el clima extremo en muchas regiones del mundo, jugó un papel en las temperaturas. No obstante, el informe aclara que los investigadores atribuyen la tendencia a temperaturas globales más cálidas al cambio climático.
Coincidentes con los estudios que hay claras conexiones con el cambio climático están las estadísticas que ofrece el informe de la firma reaseguradora: temperaturas de más de 40°C en abril, en el suroeste de Europa y en Argentina, en septiembre; temperaturas de más de 50°C en el noroeste de China; y temperaturas nocturnas superiores a 32°C en el estado de Arizona, en julio.
“La sociedad y la industria tienen que adaptarse a los riesgos cambiantes; de lo contrario, las pérdidas aumentarán inevitablemente. Hay que contar con coberturas de seguros contra desastres e, incluso, ampliarlos para amortiguar parte de las pérdidas y aliviar algunas de las penurias causadas”, recomiendan desde Munich Re.
IMPORTANCIA DE LOS SEGUROS EN DESASTRES NATURALES
A pesar de no registrar pérdidas individuales extremas, 2023 se caracterizó por ser un año con altísimas pérdidas aseguradas por desastres naturales. Sin embargo Thomas Blunk, miembro del Consejo de Administración de Munich Re sostiene la importancia que desempeña el papel de los seguros en el caso de los desastres naturales.
Y como recomendación final apunta que los datos completos y el conocimiento profundo de los cambios en los riesgos son factores clave para diseñar las coberturas para proteger a las personas contra los desastres naturales.
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